Encuentros en la intersección entre la vida y la muerte
Esta pieza fue presentada por primera vez durante la Bienal de Venecia de 2007.
Concebida para la iglesia de San Gallo, construcción del siglo XV, como proyecto colateral de la Bienal de Venecia de 2007, Viola incorporó directamente la arquitectura interna de la iglesia en la instalación, utilizando los tres altares de piedra existentes para la instalación de tres grandes pantallas de video. En las pantallas, veinticuatro personajes aparecen y desaparecen a través de un umbral de agua.
La tierra como elemento esencial
El espacio que alberga la obra nace de un proceso de investigación.
La espiritualidad humanista que la obra requería para su instalación permanente en PLANTA llevó a la creación de un ambiente que evocara el misticismo del espacio original para la que fue concebida: la capilla de San Gallo de Venecia. Sin la voluntad de reproducir el contexto religioso, PLANTA ha creado, mediante la transformación de espacios y el uso de materiales sostenibles, un lugar que acentúa el dramatismo de la obra, desligado de cualquier ornamento, y preservando su carácter trascendente.
Pionero del videoarte
A través de su obra, Viola trata en gran medida los temas centrales de la conciencia y experiencia humana: nacimiento, muerte, amor y emoción.